Rescato de este año, el haber vuelto a un gran amor que tenía olvidado hace años, la intervención de libros. No digo alteración, que para eso bastante estoy yo...
Si reflexiono sobre el por qué de haberlos dejado de hacer, no encuentro respuesta. Quizás la llegada de los nietos hizo dedicarme más a los álbumes.
En algún momento subiré fotos de los anteriores, tengo que rescatar muchos que fueron regalados. Pero ahora quiero presentarles a mis dos últimas creaciones.
Este es mi sesenta y tantos, ya perdí la cuenta . Se llama Seres alados.
Este se llama Japón. Y ya tiene dueña, mi hija que én breve partirá a ese país con una beca de estudio.
Solo comparto hoy la tapa, el interior es el tema de una clase que estaré dando en Córdoba en unos días. El único adelanto es que está lleno de bolsillos. Esta intervención es utilitaria ya que es la base de un minialbum.
Y ya estoy comenzando otro, lo tengo en el freezer para matar los bichitos libreros.
